La mejor forma de prevenir las enfermedades de la cacatúa es la higiene. Las cacatúas son resistentes a las enfermedades si reciben una dieta equilibrada y tienen un entorno limpio. Debes prestar gran atención a la higiene, la limpieza y desinfección regular de las instalaciones y de los recipientes de la comida y del agua. En CurioSfera-Animales.com, te explicamos las principales enfermedades de las cacatúas.
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Cuarentena de la cacatúa
Si es nuestro deseo tener y criar varias cacatúas, cualquier nuevo ejemplar deberá ser alojado en un lugar separado durante un periodo de unas tres semanas. En el caso de que sufra alguna enfermedad, no contagiaremos a las aves que ya poseemos. Por ejemplo, si compras una cacatúa ninfa o una cacatúa alba y crees que puede estar enferma, debes ponerla aparte durante 3 semanas antes de ponerla con el resto.
Si no hace su aparición síntoma alguno al cabo de dicho periodo, podemos decir con certeza que el nuevo ejemplar se encuentra sano. Y, por consiguiente nada impide a que lo instalemos junto a los demás. Las señales de enfermedad dependen, en cierta medida, de cual sea la dolencia contraída pero, en general, una cacatúa que no esté sana se mostrará apagada y letárgica. Perderá su apetito y permanecerá posada con aire deprimido y con sus plumas ahuecadas.
Cuando alguna ponga de manifiesto estos indicios deberá ser transferida a un lugar caliente. Preferiblemente una jaula hospital y mantenida en ella con una temperatura de irnos 30°C. Una jaula de este tipo generalmente se compone de piezas compactas, tanto por lo que se refiere a la parte superior y la inferior como a los laterales, salvo el frontal (el cual también puede serlo en parte) y por lo común es calentada mediante una bombilla eléctrica.
Ni que decir tiene que en su interior siempre deberá haber comida y agua, incluso en el caso de que el pájaro aparentemente no se alimente. Por otra parte, teniendo en cuenta que la mayoría de cacatúas son de precio extremadamente elevado, deberá acudirse al consejo del veterinario sin demora.
Infección por patógenos de la cacatúa
En los casos de infección por organismos patógenos, el valerse de tratamientos con antibióticos habitualmente lleva al éxito, siempre y cuando se apliquen en las primeras etapas de la enfermedad. Después de que se haya producido una de ellas, por muy leve que sea, todas las jaulas, pajareras y accesorios deberán ser sometidos a limpieza y desinfectados sin demora alguna.
Una solución del 10 % de lejía constituye un desinfectante excelente que puede ser utilizado con toda seguridad en la mayor parte de las situaciones. Siempre y cuando se proceda después a un profuso enjuague con agua limpia y se deje secar antes de permitir la vuelta de los pájaros.
Heridas de la cacatúa
Las heridas es improbable que se produzcan si se aplican los cuidados generales de un modo correcto. Generalmente reconocen como origen peleas o vuelos desordenados provocados por el pánico. Las de tipo abierto deben ser lavadas con una solución antiséptica y después secadas o emplear algún hemostático. Si no logramos parar la hemorragia, acudiremos al veterinario lo antes posible.
Mientras las plumas de un pájaro crecen, el cañón se mantiene lleno de sangre. Si se cortase, sangraría de modo parecido a una vena abierta. Por consiguiente nunca se debe cortar coincidiendo con el área de tonalidad rosada, sino siempre un poco más allá.
En las cacatúas blancas, como la cacatúa galerita o la cacatúa sulphurea, se puede apreciar mejor. En cambio en las cacatúa rosas, como la cacatúa galah o la cacatúa negra, es algo más difícil de distinguir. Si por algún accidente cortamos una, la solución es sujetar con fuerza la base de la pluma con tal de no dañar al animal y con unos alicates arrancamos el resto.
Uñas y picos desarrollados en exceso
En circunstancias normales, las cacatúas mantienen sus uñas y picos en debida forma gracias al ejercicio y a su tendencia a roer. A tal fin, debes proporcionar a tu mascota, perchas naturales de madera no tóxica, las cuales será preciso cambiar con frecuencia.
Si su grosor es diverso, las uñas de los pájaros se desgastarán y mantendrán la dimensión correcta. Asimismo, al roer la madera, el pico conservará el perfil apropiado. Si pese a todo y por cualquier razón las uñas crecen en demasía, será preciso recortarlas utilizando para tal fin unas tijeras de manicura afiladas o un corta uñas apropiado.
Procede señalar que en esta operación debe extremarse el cuidado para no cortar el vaso sanguíneo ya que en caso contrario ello dará lugar a una fuerte hemorragia. Si no estamos muy seguros de cómo debemos actuar, podemos acudir a nuestro veterinario o a nuestro proveedor avícola habitual para que nos ayuden.
Las mismas precauciones son válidas para un pico excesivamente desarrollado y que debe por tanto ser objeto de recorte. En este último caso el crecimiento exagerado impediría al pájaro comer de un modo apropiado y podría morir de hambre como consecuencia de ello.
El corte de uñas debe ser llevado a cabo por un profesional. Si insistimos en efectuarlo nosotros mismos, adoptemos las máximas precauciones para no seccionar el vaso sanguíneo. Lo mejor es limitarse a limar los extremos hasta que nos sea posible conseguir que la operación la realice un experto.
Oclusión ovárica de la cacatúa
Esta situación se produce ocasionalmente en las hembras grávidas cuando un huevo se queda atascado en algún punto del oviducto. Entre las causas posibles se puede incluir una escasez de calcio, un entorno frío y una inmadurez del pájaro implicado.
El huevo causante del problema es posible que tenga una cáscara blanda y elástica, lo cual viene a complicar la situación ya que si se rompe en el interior del cuerpo es probable que tal circunstancia provoque una peritonitis. Instalando el pájaro en una jaula hospital con una temperatura cálida resulta frecuente el que el huevo acabe saliendo al cabo de una hora aproximadamente.
Tratándose de ejemplares en los que la oclusión se produce con carácter repetitivo no deberán ser utilizados para la cría hasta la temporada siguiente y además se introducirán todas las medidas correctoras posibles en los cuidados generales. Además en estos casos es conveniente acudir a un veterinario.
Enteritis de la cacatúa
Puede ser causada por un cierto número de infecciones diferentes del aparato digestivo. Aparte los síntomas usuales de “pájaro enfermo”, es posible que el afectado sufra una diarrea líquida. Si éste es el caso será preciso proporcionarle una cantidad adecuada de agua para beber ya que la diarrea puede provocar una deshidratación rápida, situación ésta que es susceptible de tener consecuencias fatales.
Un pájaro enfermo debe ser transferido a una jaula hospital, proceder después a consultar un veterinario lo más pronto posible y someter a examen en un laboratorio algunas muestras fecales para determinar la naturaleza de la dolencia. La mayoría de infecciones entéricas de las cacatúas pueden ser tratadas satisfactoriamente utilizando los medicamentos apropiados.
Una buena dieta a base de arroz hervido, zanahoria rallada, manzana rallada y oxidada; para la oxidación de la manzana, una vez hayamos rallado la misma esperaremos un par de horas hasta que adquiera un color rojizo, entonces la rociaremos con zumo de limón con azúcar y se la daremos a nuestros pájaros afectados.
Dichos alimentos gustan mucho a los animales y por ello no tendremos ninguna dificultad para que se lo coman. Con ello sus deposiciones se solidificarán. Si con esta dieta no mejoran acudiremos al veterinario.
Infecciones respiratorias de la cacatúa
Entre los síntomas de infecciones respiratorias se incluyen una respiración trabajosa, el resuello, unos orificios nasales obstruidos, la tos y los flujos de mucosidades. Una vez más tenemos que son diversos los organismos causantes y que los mismos van desde las bacterias y los virus hasta los hongos (aspergiliosis). Los pájaros enfermos deben ser aislados de inmediato e instalados en un entorno cálido.
La investigación reciente ha encontrado medios curativos para la mayoría de las infecciones respiratorias de buena parte de los psitácinos y a este fin un veterinario podrá ayudarnos debidamente. Los medicamentos comerciales para las enfermedades respiratorias de los pájaros, se encuentran disponibles en los establecimientos de animales de compañía.
Ectoparásitos de las cacatúas
Se trata de insectos hematófagos o arácnidos que atacan la piel del pájaro y le chupan la sangre. Algunos ectoparásitos pueden multiplicarse de modo tal que los pájaros que los sufren se vuelven anémicos como consecuencia de la pérdida de sangre aparte de quedar estresados por la irritación provocada por las picaduras.
El ácaro rojo es uno de estos parásitos que vive en las grietas y hendeduras del recinto y que salen de noche para alimentarse. Los piojos que viven adheridos al plumaje también pueden constituir un problema. Los ectoparásitos a menudo son transferidos a las pajareras por aves silvestres y se desarrollan especialmente cuando las condiciones en ellas no tienen el nivel de higiene adecuado.
Todos los ácaros y piojos se exterminan con facilidad haciendo uso de los seguros aerosoles avícolas que se pueden adquirir en los establecimientos del ramo. Al final de la época de cría es preciso retirar las cajas de nidificación y someterlas a un profuso lavado y a una desinfección a fondo antes de que llegue la época siguiente.
Endoparásitos de las cacatúas
Se trata de organismos que viven dentro del cuerpo y los más importantes de entre ellos vienen representados por diversas lombrices intestinales. Esta clase de lombrices se encuentran instaladas en el conducto intestinal y se alimentan de la comida parcialmente digerida por el pájaro.
Las lombrices ponen huevos que salen al exterior a través de las heces y pueden reinfectar de modo continuado al mismo pájaro o a otros. Pueden llegar a nuestra pajarera a través de aves silvestres cuyas deposiciones pasan a través de la tela metálica.
Los suelos de cemento en las áreas de vuelo son el medio más seguro para mantener controladas las infestaciones, ya que resulta posible restregarlos a fondo y lavarlos con ayuda de una manguera a intervalos regulares eliminando con ello la presencia de huevos.
Los indicios de una infestación de lombrices generalmente no son perceptibles a menos que haya alcanzado un nivel elevado. Un examen regular de muestras fecales en un laboratorio de análisis servirá para comprobar si existen huevos de lombriz en ellas y en caso afirmativo nuestro veterinario prescribirá la medicación apropiada.
Importante: Este artículo es meramente informativo. Siempre recomendamos que en primer lugar acudas a un veterinario de confianza con tu mascota.
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